Siempre consideré que era una persona
cactus. Algunos somos así, nos hemos conformado con poco de lo que
nos daban, ahora piensan que con regarnos una vez al año podremos
con todo, que no pasamos sed. Nos han herido, por eso hemos
desarrollado barreras y murallas y nadie se atreve a traspasarlas
para entregarnos una dosis de agua. Nos hemos acostumbrado a
abastecernos de la poca agua que queda en nuestras raíces, de ese
amor que una vez nos dieron y guardamos un poquito de reserva y por
si acaso. Y seguimos volviendo cada noche entre las espinas que hemos
ido creando con el día y con la luz de las estrellas de guía. Hemos
llegado demasiado cansados a la cama, con restos de espinas y sangre
y no nos las hemos quitado antes de irnos a dormir, y así ha sido
como día tras día la muralla se ha ido engrosando, ahora parece
demasiado difícil y doloroso quitarlas, por eso nos las seguimos
dejando, por vergüenza, pena, miedo al dolor... cada quien con
sus razones. Supongo que en parte sigo con miedo de volver a
atravesar esa ventana que yo creía abierta y supe que no lo estaba
cuando me estampé contra el cristal, ahora pienso que todas están
cerradas aunque note el frío colándose por ellas. No sé qué pasa,
no sé por qué sigo poniéndome metáforas a mí misma para poder
entenderme, sé que nunca lo haré, que no vale con decir que soy un
cactus, o un bolígrafo con tinta que un día, solo un día decidió
dejar de pintar y nadie se atreve a volver a usarlo, o un cenicero
donde todos apagan sus tristezas, y que por eso estoy llena de
quemaduras. Por muchas metáforas que me atribuya, seguiré sin
entenderme.
Hola
ResponderEliminarEso ha sido precioso, todos tenemos formas de vernos a nosotros mismos que, aunque algunos pueda parecerle fuerte o exageradas, son acertadas respecto a la imagen, normalmente fea o dañada, que tenemos de nosotros mismos, ahora yo también soy un cactus, uno que trata de volverse flor, al menos por fuera para no preocupar o herir a los que si importan.
Besoss
¡Hola Jessie! Muchísimas gracias por tu comentario, me ha hecho mucha ilusión que te haya gustado, de verdad que sí.
EliminarTodos somos cactus en algún momento de nuestras vidas, pero y lo bonito que es aprender a regarse a uno mismo? :D
Muchos muchos besos!